L'estiu que comença (El verano que empieza)

Ed. Planeta. 2013. 224 pág.

Sinopsis

Es una hermosa historia sobre dos corazones destinados a encontrarse. Un texto optimista, sensible y emotico que defiende que la felicidad plena reside en los pequeños detalles de la vida. 

Sílvia Soler tiene una sólida carrera como narradora, cuenta con varios premios de la narrativa española en su haber y con el reconocimiento del público y la crítica. Sus novelas hablan sobre el universo femenino y se caracterizan por presentar a mujeres con personalidad. 

El verano que empieza sigue la estela de las novelas de Anna Gavalda, Katherine Pancol o Marta Rivera de la Cruz. Ha resultado ganadora del Premio Ramón Llull de las letras catalanas 2013.

Los Reig y los Balart llevan más de cincuenta años celebrando juntos la noche de San Juan. Las vidas de Julia y Andreu, avanzando siempre en paralelo, han conocido la felicidad y el desconsuelo, el amor y el desamor, la alegría y la decepción. Pero nunca han fallado a la cita de San Juan. 

Es una emotiva y luminosa novela que aborda el delicado equilibrio entre la felicidad y el desconsuelo, forjado a partir de la necesidad de sobrevivir a la tragedia y la importancia de amar y de sentirse amado.

Opinión

Ya conocía a esta autora por su obra Una família fora de sèrie (clic) y en cuento supe que le habían dado el Premio Ramón Llull de las letras catalanas 2013 decidí buscar su nueva novela para leerla, y ahora es cuando le ha llegado su hora.

La historia se centra en la vida de Júlia y Andreu desde que nacen hasta que se hacen mayores. Va saltando de una vida a otra para contarnos las vidas de ambos y de sus familias.

El modo de escritura de esta novela me ha encantado, puesto que no se centra en una historia lineal sino que va avanzando a golpes, no de año en año sino de episodio en episodio y es una cosa que hace que la leas con una agilidad pasmosa.

He vuelto a retomar la lectura en mi lengua materna que, la verdad, la tenía un poco olvidada y siempre es bueno repasarla.

Os lo recomiendo, veréis como una historia sencilla, sin complicaciones pero con un gran trabajo de personajes hace que améis a Júlia, a Andreu i a todos los personajes que les envuelven.

Además deseas conocer la casa de los Balart por encima de todas las cosas, me encantaría ver la película-serie de este libro sólo por ver esa casa además de toda la ambientación de la misma, está genial.

El título tiene una explicación muy bonita, es un brindis que aparece muchísimas veces a lo largo de la novela, y que hace que todavía ahora después de tanto tiempo de haberlo leído, al releer el título recuerde pasajes de la novela.

Ojo que también tiene su puntito triste, y yo lloré en algunos momentos pero no es para nada una novela lacrimógena.