Vuelvo por estos lares, más de una semana sin escribir.
El virus de la garganta había hecho mella en mí, mi voz se fue, pero luego vino aunque acompañada de una graciosa tos que me sigue acompañando todavía hoy.
Además el señor Blogger tuvo a bien restringirme el derecho a escribir entradas en mi propio blog, tres días intenté escribir y tres días que me echó para atrás. Lo que sí pude fue comentar a algunas amigas en blogs, para que constase que no me había ido ;).
Mi vuelta a clase fue buena para mí, ya que estaba un poco harta de estar en casa, y en la cama más. Aunque para ellos/as no fue tan bueno, dijeron un "¿ya estás aquí?" que sinceramente da muy pocas ganas de abordar el tema en cuestión a tratar en la clase.
Cambiando radicalmente de tema, en tutoría me tocó hablar de los peligros de internet, y estuvimos comentando si tenían conocimiento de quién podía estar al otro lado... y lo único que me quedó claro es que creen que el ordenador es un simple espejo en el que ellos se ven, y una ventanita pequeña por la que miran, pero no son conscientes de quién les puede ver... En abril empieza la escuela de padres con este tema, espero que vaya genial, porque de verdad hace falta.
Prometo actualizar dentro de un rato, o mañana, y ahora mismo me voy a pasear por vuestros blogs.
Es cierto lo que comentas de Internet. Yo siempre le digo a mis alumnos que no se hagan perfiles públicos en tuenti o facebook, sino que los configuren sólo para amigos, y por supuesto, que no agreguen a gente que no conozcan. No obstante, mis palabras resbalan, como siempre.
ResponderEliminarGeneración de sordos.
Un besos.